(31/01/17La Sección Novena de la Audiencia Provincial de Valencia ha confirmado la sentencia dictada por el Juzgado de Primera Instancia nº 11 de Valencia en la que se anulaban los contratos de compra de varios productos financieros de riesgo vendidos por Banco Santander por una cuantía total de 1.200.000 euros. Entre estos productos financieros suscritos por un matrimonio de clientes de la entidad se encuentran dos productos Estructurados Santander Inmobiliario Global, un Estructurado Autocancelable, un producto Valores Santander y varios “Fondos Tridente”.

Según la sentencia se trata de valores de inversión complejos y de alto riesgo de cuyas verdaderas implicaciones no fueron debidamente advertidos los clientes en el momento de su adquisición entre los años 2007 y 2009. Además son productos financieros de diseño propio del banco que fueron recomendados por los empleados de la entidad sin las debidas advertencias, por lo que ocasionaron a los clientes graves pérdidas de más de 844.200 euros, respecto al nominal invertido inicialmente.

En este caso los demandantes son personas de estudios básicos y carniceros de profesión. Clientes de la entidad desde 1989, recibieron a principios de 2007 una importante suma por la venta de unos inmuebles procedentes de una herencia familiar por lo que decidieron confiar en los asesores de Banco Santander la gestión e inversión de su patrimonio económico en productos seguros acordes con su perfil conservador. Se da la circunstancia de que otros familiares de los demandantes en el año 2016 también ganaron judicialmente pleitos al banco Santander por una cuantía de más de un millón de euros por idénticos productos a los de esta causa: Valores Santander y bonos Tridente. También estos pleitos fueron ganados por el despacho Jaime Navarro.

La Audiencia de Valencia confirma en su sentencia que el Banco Santander no cumplió con la diligencia e información completa, clara y precisa que le era exigible al proponer al cliente la adquisición de estos Bonos Estructurados, Valores Santander y fondo Tridente ordenando la restitución de los 844.200 euros perdidos.